La Bahía de Halong se encuentra al norte de Vietnam. Formada por 2000 islotes de roca kársticas esparcidos a los largo de 120 km de costa, es de una belleza inigualable y mágica.
Teníamos contratado el transporte desde Hanoi (nos recogieron en el hotel). Tardamos cerca de 3 horas, con parada de 20 minutos incluida en un macro centro turístico de souvenirs, espantoso, dicho sea de paso, pero cumplió su cometido; tenía baños y se podía comprar bebidas. Los últimos kilómetros de carretera están en un estado lamentable, algo poco comprensible teniendo en cuenta que se trata del acceso a uno de los sitios más visitados de Vietnam.
Nada más entrar en el barco, el jefe de tripulación nos indicó que nos sentásemos en el comedor ofreciéndonos un aperitivo y explicándonos todo lo que íbamos a hacer mientras estuviésemos de crucero (aunque luego en la habitación teníamos un papelito con toda la información). Después una visita rápida a nuestro camarote, comimos y nos llevaron a la primera visita que hicimos.
La primera excursión del día fue a la cueva de la Sorpresa, la subida por unas escaleras hasta la cueva era como estar en el metro de Madrid en hora punta; un agobio, la verdad. La cueva es una pasada y una vez dentro, como es grande, la gente se dispersó y se pudo caminar bien, así que si sois como yo y os agobian los mogollones de gente, no os preocupéis que luego la cosa cambia y además, las vistas de la Bahía según se va subiendo son impresionantes.
Por la noche, nos contaron que Paradise Cruises organiza bodas y cenas privadas dentro de la cueva decorándola con velitas.
La segunda excursión nos dieron a elegir entre kayak, playa y subir a una colina para ver las vistas de la Bahía. Aunque en un principio el plan era kayak nos atrajo la idea de seguir subiendo escaleras para ver buenas vistas, por lo que optamos por esta última. A la bajada podíamos darnos un baño pero el agua se veía llena de porquería de los barcos y lo descartamos.
Luego nos dieron tiempo para ducharnos y antes del atardecer teníamos en la parte de arriba del barco la clase de cocina en la que aprendimos a hacer los famosos rollitos vietnamitas, cada uno hizo el suyo, los frieron y nos los comimos. Después de la clase, nos ofrecieron un cóctel “happy hour” en la que comprabas una bebida y te daban otra. El día terminó con una cena deliciosa.
Al amanecer del día siguiente nos esperaba una clase de taichi, a la que solo acudimos una chica y yo. Después desayunamos y nos llevaron a un embarcadero donde tomamos una barca hecha de bambú y entramos en una cueva al aire libre preciosa.
La Bahía de Halong me pareció un sitio único. Y del crucero he de destacar el trato recibido, la exquisitez de la comida (sobretodo la cena), la elección de las actividades y su organización tan bien llevada y sobretodo, donde para mi está el lujo mayor, en las pocas personas que éramos, y encima tuvimos la suerte de disfrutar de compañía de lo más simpática y agradable; un grupo de españoles y un par de parejas de americanos.
No te pierdas el vídeo que grabamos en la Bahía de Halong
Qué chulo el barco!! Mira que el que yo cogí no estaba mal, pero el vuestro está mucho mejor!!!!
Saludos
Una pasada!, lo disfrutamos un montón!!!!, saludos
Ayyyy qué guay.. yo voy este verano a Vietnam y por supuesto Halong está en la ruta. ¿Dónde contratastéis la excusión? ¿Cuánto os costó? pensaba si no llegar allí por libre y contratar directamente barco al llegar. Si me puedieras resolver estas dudas te lo agradecería. Mil Gracias.
Hola Ana, la excursión la contraté en internet antes de ir y no recuerdo el precio, pero no creo que fuese excesivo. Es posible que puedas contratar directamente el barco al llegar, hay un montón de compañías y así puedes comparar precios. Disfruta mucho de tu viaje!, Saludos!